amor

Tengo un amor, un gran amor...
Nació pequeñito, vestido de amigo, compartiendo secretos, dolores y canciones.
Un día me miré al espejo y me encontré pintado en la cara un corazón con su nombre y tuve que alejarme corriendo para mantener intacto mi vestido de amiga.
Sin embargo, ese disfraz pesaba demasiado y pensé que si no me vestía de su amor andaría desnuda para siempre. Como él dice, tiendo al daramatismo...
Cuando todo parece que se acaba, algo empieza a nacer y desde entonces son más de cuatro los años que compartimos la vida y más cosas.
Tengo un amor, un gran amor.. y nada es comparable a mirar su cara en mitad de la noche, alargar la mano y tocarle un poquito para que no se despierte.
Tengo un amor, un gran amor...y es infinito