Conciencia de sí mismo

Hay pocos momentos en los que uno toma conciencia de sí mismo.Son escasas las veces en las que uno vive esa extraña sensación de saberse corporeo, de diferenciarse con el contenido que hay debajo de la piel y conectarlo con lo que se contempla en el espejo; conciencia de uno mismo. Esto es algo que intento hablarlo con gente diversa y creo que no siempre me explico bien porque algunos me miran como si estuviese susurrando en coreano, pero ocurre.

Quizá el día del cumpleaños sea un momento proclive a pensar en la finitud, en la materialidad de la existencia, en lo relativo de la vida con respecto a la dinámica del mundo. Cumplimos años sin quererlo, la vida se escurre en recuerdos y días que intentamos agarrar pero se escapan, sin remedio, entre los dedos.

Hoy celebro el cumpleaños del ser más amado, ya son cinco los que he visto a su lado...